¿Cada cuánto tiempo se recomienda realizar un tratamiento quiropráctico a un animal?
En lugar de establecer unas pautas estandarizadas, consideramos que lo ideal es evaluar caso por caso. Los periodos de cada sesión se establecerán según el diagnóstico o las necesidades específicas de cada animal: prevención, diagnóstico y tratamiento de una patología, animales deportistas…
Pacientes con patologías concretas: El periodo entre sesiones vendrá determinado por el problema y su evolución. En el caso de Aro, un caniche gigante de 8 años con hernias discales, las visitas se establecieron cada 3 meses.
Pacientes que realizan sesiones preventivas: Según deseo de sus propietarios. En el caso de Portos, un caballo criollo de 23 años, cada mes, según el deseo de su propietaria.
Pacientes con alto nivel de entrenamiento: Mantenimiento cada 15 días (las sesiones quiroprácticas se combinarían o alternarían con otras herramientas terapéuticas según necesidad)
Animales deportistas. Visitas con un intervalo de entre 1 y 3 meses.
Animales que se enfrentan a una competición de fuerza, como el polo o el salto: justo antes de la competición, para aprovechar los beneficios del tratamiento quiropráctico.
Caballos de tanda: Cada 1- 3 meses.
¿Cuánto tiempo tardan en notarse las mejoras en los animales?
Según el grado de afección, la mejora puede percibirse al momento del desbloqueo, aunque el efecto completo de una manipulación quiropráctica se aprecia pasados unos cinco días; una vez que el cuerpo, a través del sistema nervioso, comprende o integra su nueva alineación.
Estudios recientes han demostrado que el período post ajuste produce un aumento de la fuerza durante los 40 minutos posteriores al tratamiento.
¿Se utilizan medicamentos en el tratamiento quiropráctico?
La etimología griega kheir, raíz de la palabra quiropráctico, significa “mano”. El ajuste quiropráctico de todo el cuerpo se realiza exclusivamente usando las manos. En ocasiones, pueden utilizarse herramientas (percutores) que suplen o complementan el trabajo realizado manualmente.
Solo en algunos casos, cuando hay dolor agudo, antes del tratamiento quiropráctico se puede recurrir a algún tipo de antiinflamatorio, bien de origen natural o químico, para que el tratamiento resulte menos molesto y más efectivo.
¿Qué enfermedades se pueden tratar con el tratamiento quiropráctico?
El uso más común de la quiropráctica es el tratamiento para problemas de movilidad, en los que la biomecánica del cuerpo se ve comprometida. Otro uso recurrente es el de activar la movilidad en animales de edad avanzada (problemas de artrosis o degenerativos) postquirúrgicos, con largas convalecencias o sometidos a largas postraciones. Los resultados en estos casos son visiblemente satisfactorios.
Por otro lado, existe la vertiente profiláctica o de prevención consistente en la realización de un ajuste quiropráctico cada cierto tiempo para mantener una columna vertebral sana y flexible y con ello un sistema nervioso y un organismo activo.
Aunque las virtudes de la quiropraxia llegan mucho más lejos y puede contribuir a mejorar y compensar, por ejemplo, problemas de fertilidad, auditivos u oculares, íntimamente relacionados con afecciones y problemas lumbares y el ramal del nervio que se ve afectado por estas.
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